Ecuador recibirá el apoyo de equipos de rescate de Colombia y México tras el fuerte sismo de magnitud 7,8 que sacudió el país la noche del sábado y deja al menos 41 muertos, señaló el presidente Rafael Correa. "Todavía no es que necesitamos vituallas, alimentos, nada de eso, pero sí necesitamos respaldo en equipos de rescate y están viniendo equipos de rescate de Colombia y México", dijo Correa en una entrevista telefónica con Radio Pública.
El mandatario, de visita en el Vaticano, donde participó en una reunión sobre desigualdad social, tiene previsto regresar la tarde de este domingo al país para visitar las zonas afectadas. "Estamos enfrentando una tragedia de magnitud, un sismo de 7,8 grados en la escala de Richter es un sismo extremadamente fuerte", apuntó el gobernante.
El terremoto, el más fuerte desde hace casi 40 años, con epicentro en la provincia de Manabí, deja hasta el momento 41 muertos, según informó el vicepresidente Jorge Glas, encargado del gobierno. El movimiento telúrico también se sintió en el sur de Colombia y en Perú, pero en ninguno de los países se reportaron víctimas por el momento. Las autoridades ecuatorianas han decretado el estado de excepción a nivel nacional "para precautelar el orden público".
"Toda la fuerza pública está en estado de máxima alerta para poder proteger la vida de los ciudadanos", señaló Glas en rueda de prensa desde Quito. Según las primeras imágenes difundidas por los medios y usuarios de las redes sociales, el potente sismo dejó edificios, puentes y otras infraestructuras caídas y cortes de luz en las seis provincias más afectadas, ubicadas entre el suroeste y el noroeste del país: Esmeraldas, Los Ríos, Manabí, Santa Elena, Guayas y Santo Domingo.
Correa añadió que se han activado líneas de crédito de contingencia "por cerca de 600 millones de dólares" para atender la emergencia. "Le pido al país calma, unidad", manifestó Correa quien además expresó su "solidaridad e infinito amor a las familias de los fallecidos".
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