Una serie de fuertes sismos, que comenzó con un temblor de magnitud 5,8 grados, sacudió ayer las regiones de Arica, Tarapacá y Antofagasta, en el norte de Chile, sin dejar daños ni riesgo de tsunami.
El temblor de 5,8 grados se registró a las 9:59 (12:59 GMT) y tuvo su epicentro 135 km al oeste de Iquique, a una profundidad de unos 31,8 km, según los datos del Centro Sismológico Nacional de la Universidad de Chile.
"No se reportan daños a personas, alteración a servicios básicos o infraestructura producto de este sismo" en las regiones afectadas que se encuentran a más de 1.800 km al norte de Santiago, informó la Oficina Nacional de Emergencias.
Tampoco se declaró alerta de tsunami, al no producirse las condiciones necesarias, según anunció el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (Shoa)
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