La Yakuza, nombre que identifica a la mafia japonesa, una organización criminal que data del siglo XVII, concretamente del período Edo, está dispuesta a “ayudar a la reconstrucción de Japón en todo lo que sea necesario”.
La cadena de televisión Sky News tomó contacto con su corresponsal en Australia quien se había comunicado con una “importante fuente” ligada con uno de los 3.000 clanes que actualmente se reparten el territorio del crimen en Japón.
“Código del honor”
De acuerdo con el contacto citado por Sky News, la Yakuza “apela al código del honor que rige sus actividades para declarar una tregua y abocarse a ayudar a su pueblo”, escribe Dan Zola, periodista independiente en el blog de Sky News.
“La Yakuza ha sabido diversificar sus intereses hacia negocios legales. Curiosamente, uno de los negocios más significativos para la mafia japonesa es el del reciclaje, que supone algo más del 50% de los negocios del hampa. Ésta combina las empresas legales con las ilegales, ya que de este modo pueden emplear las legales como tapadera de las actividades ilícitas y despistar a las autoridades”, escribe Zola.
Si bien la fuente no detalla en qué modo la mafia japonesa brindará su ayuda, Dan Zola señala que “la complicidad entre el hampa y el mundo de los negocios abarca gran parte de la economía: trabajo temporal en obras públicas (construcción, sector inmobiliario, etc.); ocio; transportes; intervención en conflictos civiles y comerciales; préstamos y deudas; reciclaje; bolsa y otras inversiones; y actividades políticas y deportivas, lo que fácilmente podría destinar fondos y empresas subsidiarias a tal efecto”.
Desde los años 60 del siglo XX, muchas empresas de construcción y obras públicas pertenecen a la Yakuza. Asimismo, la mafia se ocupa también de poner la mano de obra.
De hecho, muchos de los trabajadores laboran para la Yakuza porque los salarios que pagan son mayores de lo establecido en los convenios del sector y, por lo tanto, los empresarios también prefieren a los empleados que vienen de parte del hampa nipona, puesto que suelen ser trabajadores más cualificados y porque si no lo hacen son objeto de diversos boicots y las obras acaban demorándose, provocando grandes pérdidas económicas.
Se calcula que la mafia japonesa cuenta con 100 mil personas sólo en territorio nipón.
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